Cientos de musulmanes han asaltado una iglesia evángelica presbiteriana utilizada por los habitantes del sur de Jartum este pasado fin de semana y han herido a tres personas que intentaron defenderla, según han informado testigos.
Uno de ellos ha explicado a Reuters este domingo como vio salir humo de algunos de los árboles en el recinto de la iglesia y de los vehículos de seguridad que esperaban cerca y ha indicado que parte de una pared de ladrillo fue destruida.
Yusef Matar, secretario general de la iglesia ha indicado que tres personas que intentaron defender la zona habían sufrido heridas leves. "Nadie lo podía creer. Nada así había sucedido antes", añadía. Matar ha afirmado también que la iglesia era utilizada por etíopes, eritreos e indios, así como por los cristianos de Sudán y de Sudán del Sur.
También ha explicado que contactó con las autoridades para defender la iglesia. "Somos ciudadanos, somos de Sudán, no somos extranjeros", ha protestado. "Ellos deberían protegernos", señalaba. El sábado pasado los atacantes saquearon edificios, derribaron paredes y quemaron Biblias ha detallado Matar.
RETIRADA DEL EJÉRCITO Y LLAMADA A LA YIHAD
El ataque se produjo un día después que el Ejército de Sudán del Sur comenzara a retirarse de la región petrolera de Heglig. Hecho que el Ejército explicó el mismo viernes que se debía a que había "liberado" Heglig por la fuerza, lo que provocó celebraciones generalizadas en Jartum.
En este ambiente un predicador musulmán aprovechó el clima de excitación para instar a la 'Yihad' contra los cristianos durante las oraciones del viernes por la noche, lo que provocó que una muchedumbre atacara la iglesia al día siguiente, según ha explicado Matar.