De 98 años de edad, murió en Budapest antes de finalizar el juicio.
El criminal de guerra, que engrosaba la lista de los más buscados, fue detenido el verano pasado. Acusado de haber participado en el asesinato de más de quince mil judíos durante la Segunda Guerra Mundial, tenía cargos tanto en Hungría como en la vecina Eslovaquia.