El primer ministro, Biniamín Netanyahu, se mostró "escéptico" sobre los eventuales resultados de las conversaciones que el grupo 5+1 mantendrá con Irán en Bagdad el próximo día 23 sobre su programa nuclear.
"Obviamente nada sería mejor que ver cómo este asunto se resuelve diplomáticamente, pero no he visto prueba alguna de que Irán sea serio sobre la detención de su programa de armamento nuclear", señaló en Praga.
Netanyahu, quien ha asegurado que Teherán tiene en común con la Alemania nazi el deseo de "aniquilar a millones de judíos", cree que Irán ve en el diálogo con el grupo 5+1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) "otra oportunidad para manejarlo y retrasarlo como hizo Corea del Norte durante años".
"Quizás intenten ir de reunión en reunión con promesas vacías. Quizás acuerden algo en principio pero no lo apliquen. Quizás incluso acuerden aplicar algo que no haga descarrilar su programa de armamento nuclear", agregó.
Según el jefe del Gobierno, "Irán es bueno jugando al ajedrez" y sabe que "a veces hay que sacrificar un peón para salvar al rey".
Netanyahu reiteró por último las demandas que, a su juicio, deberían suponer de forma "muy clara" "el objetivo de estas negociaciones": la completa interrupción de las actividades de enriquecimiento de uranio, la salida del país del material ya enriquecido y el desmantelamiento de la instalación situada cerca de la ciudad de Qom.
"Cuando se logre este objetivo, seré el primero en aplaudir. Hasta entonces, cuéntenme entre los escépticos", sentenció. EFE