El Senado estatal aprobó por 25 votos a favor contra 22 en contra el proyecto, que ya contaba con trámite en la Cámara Baja. Ahora, el Ejecutivo deberá promulgarlo para su entrada en vigencia.
Pese a que ambos cuerpos legislativos están controlados por los demócratas, la iniciativa tuvo duro debate pues era resistida por los republicanos y los oficialistas afroamericanos, que argumentaban la oposición de las iglesias y los fieles de sus distritos.
El ex vicepresidente republicano Dick Cheney, en cambio, apoyó la el proyecto. El líder opositor vive en el estado y su hija es lesbiana por lo que se sumó a los activistas gays e hizo campaña a favor de la ley.
Maryland se convertiría así en el octavo estado estadounidense que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo.
